El estigma familiar, tercera parte: Mi prima Eve


«A human being’s made of more than air
With all that bulk, you’re bound to see him there

Unless that human bein’ next to you
Is unimpressive, undistinguished
You know who. . .

Should have been my name
Mister cellophane
‘cause you can look right through me
Walk right by me
And never know I’m there
» – Mr Celophane, Chicago

Mi prima Eve empezó a noviar por primera vez la semana pasada, cuando cumplió 25 años.

La edad podría haber sido considerada por nosotros como normal, habitual y hasta adecuada, si no hubiese sido porque ella lo sintió con 14 años de atraso.

Puede suceder que para ustedes, esta apreciación no tenga sentido, pero entonces necesitaré contarles los parámetros comportamentales que le marcaban claramente dicha demora:
Estándares que no había podido cumplir, un superyo, como tenemos todos que, en este caso particular, estaba marcado en forma significativa por el accionar de su hermana gemela, Eva.

Eva había sido primera y mejor en todo:
Había caminado antes, hablado antes, dibujado y cantado mejor.
Era la preferida de sus padres, de sus abuelos y tíos, de sus maestras y profesores y, eventualmente, también de los hombres.
Popular y precoz, Eva supo ser, desde chiquita, una hembra irresistible.
Rodeada de Adanes, le hacía justo honor a su nombre cuando, al igual que en el relato bíblico correspondiente, terminaba hipnotizándolos y significando la perdición de todos y cada uno de ellos.

Por oposición, Eve los hubiese llenado de dicha.
Si alguna vez, alguno de ellos, se hubiese detenido a verla.
Eso no pasó en 364 días y 24 años.

Por eso, el día en el que celebraba su cuarto de siglo, Eve se cansó.
Maquilló sus labios color carmín furioso y levantó la vista.
Salió a la puerta y se vendió al primer postor: Huberto, un adicto a sustancias ilegales, jugador y sin siquiera una pizca de buenos modales.

Para los entendidos, cualquier “sillón”.

3 comentarios

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3 Respuestas a “El estigma familiar, tercera parte: Mi prima Eve

  1. Cari

    Quieres decir con esto que en tu familia las mujeres se conforman con cualquiera que les dedique un poco de atención??? como le paso a tu abuela???… Seria bueno que te hicieras amiga de Eve y le enseñaras que un sillon puede estorbar la linda combinación de una casa y a veces esos sillones dejan mal sabores a la vida… y aunq haya comenzado tarde… no es bueno que comience cometiendo errores… es mi punto de vista

  2. al menos se vendió, y no se regaló.

  3. Las comparaciones…tienen resultado catastróficos, como se ve.

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